jueves, 4 de junio de 2009

Kalamicoy Héctor















INTRODUCCION A UN FEO LUGAR



Neuquén tiene un fino viento
que me tiene definitivamente loco
y llena todo de tristes arañas grises
y grandes cucarachas charoladas
que acarrean
pequeñas partículas de mierda
desde el baño
para que reposen sobre el pan duro
que como a diario.
Y por las mañanas trato
de fregarme el rostro vigorosamente
para olvidar las siniestras pesadillas
que despierta este sitio en mí
jamás sueños
dulces con sabor a frambuesa,
pero nunca hay agua en Bolivia
sólo esas grandes cuatro por cuatro
con bellas mujeres rubias
estrellas que destilan perfumes de riqueza
y comen productos para mejorar su tránsito lento
que comen productos para poder cagar como
caga la mayor parte de la gente
que gasta su triste culo proletario en bicicleta
buscando una tranquilidad que
con el trabajo duro no se logra.
Neuquén es un lugar cálidamente hostil
donde albañiles con las rodillas gastadas
escupen piropos a oficinistas
tan duramente explotadas como ellos y que
sueñan con el concubinato a los veinte
y con los sueños que vende un Wallmart multicolor
que provee para Halloween y para el día de acción de gracias
y para el regreso de los jodidos gringos
de Irak (Aunque pocos lo han hecho)
Neuquén, ¡Puto lugar seco en crecimiento!
Con ese cristote de madera y esa impresentable
banderota que veo cada vez que cruzo el
puente en colectivo y Neuquén de los humos de las
tomas y de los saqueos
cada vez que la tradición de dinosaurios y
aborígenes de un pasado glorioso de tan solo cincuenta años
mal vividos en una meseta con un poco de petróleo
se desvía en una piedra contra las vidrieras
de los comercios del bajo.
Y Neuquén
de las cervezas tibias,ya que siempre hay treinta miserables
esperando antes que yo
por un poco de bebida fría para olvidar
la escasa vida de este triste lugar.






OH!... POETA





(HOMENAJE A BERBEL)



Oh poeta! Libre pensador, bardo, sin el petróleo poeta,


el colesterol dañino no hubiese apagado


tu remota y ancestral voz, graciosa, única, grasosa


con impostura de piñón


que nunca comías, preferías el chivito


que ahora los aborígenes exportan


aunque los persigan.


Oh cantor! Creador de simiente de músicos y poetas iguales a ti


funcionarios, constructores de un pasado ideal


a los que


la tirita de novillo y las morcillitas les tapan los ojos.


Por lo dicho


porque canto como tu no cantas


y hago lo que tu no hacías


bardo inmortal, poeta eximio, inmortal ciego,


es que muestro al perro que se arrima a la parrilla


bajo la araucaria, bajo las pocas que quedan sin dueño.


Y observo la grandeza del Neuquén,


la Neuquén para los turistas


Y veo que yo sólo te entiendo y te escucho,


porqué no sé leer


como muchos acá en Neuquén.


Por eso también entono a los basurales,


a los ex genocidas ocultos, a los abortos clandestinos


y a los que fabrican una historia, les advierto poeta:


“los caramelos media hora


tienen ciento veinte años de historia:


deben ser neuquinos de pasado glorioso”



COMO TE QUIERO KO KO



El colectivo rojo con sus manzanitas


casi un contenedor con ruedas.
Y yo me acordé cuando trabajaba
en las cámaras de frío


y pensaba que iba a llegar un contenedor


como un gran tupper


con mil chinos podridos y re-muertos adentro.



Ahora el colectivo
monopoliza y mete mil
de nosotros dentro y el chofer
puto aborto
puto pasivo puto pendejo puto colaborador
grita:¡ no hay cambio!
atrás hay espacio!


que qué se piensa la gente
y la multitud que mira toda apretada
como corderos colgados


y yo pienso que si vamos a rebelarnos


¿Ahora?


Matemos al chofer


y a los milicos
que viajan sin pagar y ocupan los asientos
matemos al chofer
Y después vayamos por el dueño de la empresa
y colguémoslo también
como a Mussolini , ¡pero de las bolas!¡
Quememos todo, tristes maricones!
si hay algún mormón mejor, si es gringo mejor
la grasa del primer mundo arde bien
arde excelente.





El Birkenau rodante!



La mujer embarazada parada
y el viejo que no se sostiene
parado


y todos parados
siempre miles de kilómetros
en este Ko Ko de mierda


en este Ko Ko de mierda
¿Cómo le voy a cantar al valle?
le voy a cantar parado


como una erección inmensa
para partir el valle al medio
y a todos los colectiveros a toda esa gente
a toda esta gente


que se la come sin gritar
siempre se los cojen con la música
del monopolio del buen servicio de los coches nuevos
y les tiene que gustar.



Mierda profunda y yo


jodiéndome
jodiéndome,parado después de haber pagado
ojalá no choque
ojalá frene a tiempo este pendejo nuevo este viejo ciego
siempre quise llegar
ojalá no se prenda fuego
mientras cargan combustible


con nosotros adentro para ahorrar tiempo
Ojalá


consiga un puto duro asiento
en el que dos horas de viaje
sentado en un palo sentado en un duro


palo


torturador
con un gordo tamaño cachalote
que la gracia depositó a mi lado
para sentirme más sofocado
para sentirme más mierda!



Ojalá


esta broma pase a horario
o llegue hoy rápido
sin chocar sin volcar con esas ruedas tan lisas


y con toda esa gente adentro:


parece que hicieran fletes a la luna
no quieren dejar nada para el otro viaje
no quieren volver!
Todos tenemos que llegar todos
menos el intendente ladrón


y el turro del gobernador y el puto del presidente y todos


los putos que dejaron


este puto país así así


ellos llevan su humanidad en asientos blandos


de Jaguares de Mercedes de Ferraris


ellos y sus mujeres rubias y sus hijos tarados


¡flojos putos!


refinados príncipes de este país choto y destartalado


lleno de pungas y degenerados


triste lata hedionda que siempre explota y deja muertos


que siempre choca y nunca frena





¡como mi querido Ko Ko!





Notas para no-neuquinos: el puto lugar es mi tierra; el muerto es un maestro mandado a matar por Sobisch; Berbel es el poeta más popular de la provincia, adorado especialmente por su voz ronca, y Ko-Ko es la empresa de transporte interurbano que monopoliza el movimiento de la gente que no tiene auto, entre chacras y pueblos)






---------"Kamasutra apócrifo"



...De todas las posiciones, ella eligió la del ausente. Él siente el peso de ella punzante sobre el pecho y termina tan deshecho que apenas puede levantarse de la cama para cumplir con sus obligaciones diarias.....



---------"Censura"





Alberto Gonzáles llega muy contento a procedente de Sudamérica, pero pronto se da cuenta de que no es tan bienvenido en. La y los son realmente jodidos con los extranjeros. “Sudaca, vuelve a tu país. No tenemos ni lugar ni trabajo para ti”.Gonzáles no hace caso de lo que le dicen, pero los insisten en su actitud y día a día ponen trabas a la vida de Alberto; aunque trabaja duro, siempre lo hostigan. Alberto Gonzáles piensa que ni siquiera los aborígenes en América fueron tan persistentes en su actitud hostil hacia los primeros inmigrantes de origen.“No es justo, piensa Alberto, mi abuela es y mi abuelo también”.Al final el asunto se resuelve rápidamente cuando la atrapa a Alberto Gonzáles y lo expulsa de. “No tiene la visa en orden”. “Pero, sí, yo, la embajada, me dijo que”. Alberto vuelve a Sudamérica, y cuando incidentalmente rememora su estadía en, critica duramente a esos ciudadanos y a ese país que no merecen nombrarse. ....
Héctor Kalamicoy (Bahía Blanca, Buenos Aires, 1978) ha estudiado en la Universidad Nacional del Comahue (Neuquén, Argentina). Escribe poesía y ocasionalmente microrrelatos. Su texto





"Kamasutra apócrifo" fue seleccionado en el Premio Margenes; no, en cambio, "Censura". Ambos son inéditos.....





Héctor Kalamicoy vive en Neuquén capital desde hace varios años. Nació en Bahía Blanca en 1978. Dice de sí mismo:


"El estudio bieen, el trabajo miserable y la escritura, ya ven ustedes. Mis expectativas los aburrirían perdidamente y mis esperanzas caben en el punto de la "i" que recién escribí. Creo que ya tengo buenos motivos para quejarme y escribir poesía, se sabe que lo bueno se disfruta y lo malo explota en una larga serie de palabras que forman un poema. La poesía es siempre, para mí, protesta y actitud no pasiva"

1 comentario:

Fernanda Maciorowski dijo...

saludos, Héctor.

un abrazo


Fernanda