INTRO
Scafandra sale por las noches a incendiar las rutas del recuerdo.
Me habla sesudamente entre los vasos y las miradas ajenas como inventándome en cada orilla de las manos que me afectan. Yo lo oigo arribar en la puerta trastabillado de luna tan infecto en su imagen de poesía tan locuaz en su imagen de sueño.
Scafandra titubea al sentarse en la madrugada, su espíritu merodea en las bibliotecas buscando el horizonte - ése que aúlla herido en el silencio- podría ser acaso el mismo que añora la sonrisa cuando las luces retoman la piel en el abrazo.
Se desviste en moralejas y correcciones porque intenta desprenderse ilusorio al llegar con el vino la palabra.
Llora y se hace humareda, cúmulo, bocanada de amor, manto de espinas y desierto cuando la lluvia no lo percibe. Me cuenta con euforia sobre los hechos inocurridos, con su voz de canto melancólico para ordenar el gesto que hará un segundo, la geografía del verso.
Scafandra dice que es un capitán de un botecito sin velas, por eso trepa con cada estrella a volar el tiempo, para navegar sin prisa en el olvido y la tibieza.
El no despierta cuando no hay asombro, la reunión, el delirio y la magia. Dice que acuna los días en los cuales un tanino de fémina le hace recordar el sudor y la caricia.
Scafandra no tiene donde morir, porque jamás le ha interesado abandonar el alma; el tiempo sirve – me cuenta a diario- que hay un hombre latiendo en el espacio.
No hay belleza en el final, me cuenta.
Y yo no puedo seguir escribiendo,
cada vez que me abandona.
Uno
Ayer tuve la chance del cielo una agüita me lamió los negros alambres jugando a recorrer con el frío su vientre. El capitán habló de ciertos jugos que empañan el nombre por eso cuando la tierra eleva en el viento sus pasos respira el enigma su gracia hace del mito la vida transforma la sabia en lo oculto… Dijo: somos dromedarios que nunca beben el retorno ni el pasado huella gélida en un soplo que fuimos oración o un verso pero nunca súplicas ni ojo huerfanito.
Pasa aguardiendo el río resignados a concebirnos en el signo más allá de mí cuerpos que oyen su voz para que mi sangre se amontone por el camino.
Dos
Quienes almados han dejado a lo profundo un nacer de grito aliento entretejido de idas náufragos para deslumbrarse de luna son de esos que van a roer
el crepúsculo mientras se muere un abrigo de aire. Cuentan la piel es un descuido de la muerte todo evoca a alumbrarse porque hay pupilas todo mama del pecho porque hay madre almada de ausencia y oscuridad celeste. Saben luminar en la noche un pozo estrellero que devuelve su silencio una grave ilusión que lamenta parir identidades tan sin poema tan sin canto a los quienes almados han dejado de ser algo más que un humito dormido.
Tres
Habrá de amanecernos el hambre tendidos al poniente un contemplar oleado de esperas de otros y las nuestras
Custodios serán los que huyan nos verán señuelos navegantes
como miran el llanto como miran el exilio como miran el reverso de sus labios.
Remaremos hacia su adiós hacia su alegría juntos alzarán el trago generoso para olvidarnos y olvidar.
Pero en el pensamiento no aullaremos ni espantados ni desaparecidos
“y todos como presas” cantaremos miraditos.
Si nos hundimos de tanto espejarnos,
No habrá scafandra que nos ampare.
( de “Scafandra”- inédito, 2008)
El mecanismo de la soledad,
durante una niebla,
(de secretos)
me dijo que el incienso
de una habitación
en la que moran
los extranjeros del día
le hace nudos a la carne,
"- y es un graffiti
del porvenir... -"
me dijo.
Sobre la hierba /
no logró la luz
penetrar la coraza
del hombre
Allí
hay cristos
poetas /
que aguardan
amanecer
*****
(de Secuelas- inédito, 2006)
Hacia los andamios
De tanto barro y lluvia
Cuando gotean las carpas
El viento trae memorias
Las casuchas que adornan la ruta
Los perros, aúllan
La penita del pobre
Las partidas de los hombres a la fábrica
Trabajar sólo no
Trabajar con el hermano
Pa quel pan halle su mesa
Su caldo a media llama sus papas solitarias
Náufragas inmensas
Nlas bocas e las crías
Que auguran
Surcos por donde viaja la dignidad
Quien se halle en el cielo
Que me cuente como se ve el mañana
Desde toda la altura que me diga
Si es humilde como el sueño
De los obreros
Que hacen el amor para la vida
Para la época que ya vendrá y será mejor
Mientras al reverso de sus frentes
Ya comienzan a salir los años
Que llegan como apariciones
El tiempo del barro
Siempre esel mismo
Moldea gallos flacos anunciando la luna
Allí se reza a las alturas
Deseando que los milagros tengan rostro de abundancia
Aunque todos los deseos
Duren lo alto de una carpa que al costado de la ruta
Siembra su postal humana
Maravillosa.
(de “Homenaje a Víctor Jara”- inédito)
Carlos Roberto Pérez, nació en Pico Truncado, provincia de Santa Cruz en 1980. Se formó como estudiante en licenciatura y profesorado en letras en la Universidad Nacional de la Patagonia Austral. Poeta, escritor, coordinador de talleres literarios y gestor cultural. En Río Gallegos junto al escritor Pablo Lorenzo edita en 2003 la revista literaria “Los Primos del Marqués”, primera publicación de esa línea estética en dicha provincia, con ella escribe su primer y único poemario editado: “Morador”. Se editan junto a la revista a una autora santacruceña novel, Nadia Ortiz. Junto a la poeta María Silvina Ocampo, organiza el primer encuentro Internacional de Poetas en 2005; en 2004 y 2006 inicia talleres de poesía en el interior y arriba con esta propuesta a los entes referenciales de actividad de la poesía Patagónica (encuentros, ciclos, congresos), difundiendo, por medio de la revista, a diversos autores de Santa Cruz, desconocidos en aquel presente. En 2007 organiza el Foro de Escritores santacruceños, que realizarán el debate para la conformación del documento “Ley de Fondo Editorial Provincial”, inexistente en dicho lugar. Posee títulos inéditos, “Secuelas” (poemario), “Scafandra” (poemario novelado) y “homenaje a Víctor Jara” (trabajo para performance junto al poeta Washington Verón y el cantautor Enrique Paiyalef). Ha realizado conferencias, crítica literaria y prepara en la actualidad un libro de cuentos breves. Reside actualmente en la ciudad de Puerto Madryn, Chubut.
Recomienda los siguientes autores:
- María Silvina Ocampo
- Maritza Kusanovic
- Ariel Williams
- J. Carlos Bustriazo Ortiz
- Julio “Mochi” Leite
- Washington Verón
Recomienda los siguientes autores:
- María Silvina Ocampo
- Maritza Kusanovic
- Ariel Williams
- J. Carlos Bustriazo Ortiz
- Julio “Mochi” Leite
- Washington Verón
8 comentarios:
Sabés que siempre admiré tu poesía, mi viejo y sigo haciéndolo. En cierto modo y más allá de la amistad accidentada que llevamos, aún seguís siendo una especie de guía.
Un abrazo, viejo complinche de copas y versos y que nunca muera la poesía!!!
Mario Petroff
Aparecíste Carlitos!. Sos un genio, cada día escribís mejor. No te mueras nunca amigazo. Cristopo.
Gracias Cristopo, con azul o sin azul. Sé que soy el mejor de los poetas de todos los tiempos. No hacia falta que me lo confirmaras. Ah...yo también te admiro. Creo que sos de lo mejorcito que ahí por estos pagos aunque me gustaría darte un taller literario, exclusivamente para vos. Noto excesivos errores de ortografía (no a drede) en varios de los comentarios de tu blog. Besitos y gracias por estar compartiendo este maravilloso mundo virtual. Carlos Pérez.
Evidentemente, Lorenzo tenía razón...Cristopo tiene sangre azul!. David.
Ay, Cristopo! ¿por qué te tomás el laburo de comentar lo que escribe este Pérez? Me da lástima este hombre, es soberbio. Dice que le gustaría darte un taller para tu ortografía, pero quizás tenga que empezar a estudiar él. Pone "ahí" cuando debería decir "hay", p.ej.
Debería tomar clases de HUMILDAD, pues no sostiene su supuesta calidad literaria con sus escritos.
¡Así lo veo YO!
El tehuelche y juira, canejo!
Sería bueno poder entender algo de lo que quiso decir el poeta. Demasiada palabrería vana para expresar no sé que concepto.
Laura
no es tan complejo laura...habrá que definir un poco mejor "palabraría vana", la poesía no es como la prosa -lenguaje directo- mejor entonces no leas a otros autores, porque te vas a perder...
y a vos, tehuelche chupamedias de cristopo, decile a él que te de clases de humildad, que sabe un monton, y de paso, que de clases de dar la cara, este blog no es como el de él, andá a insultar al blog de tresguerres, pequeño obsecuente
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